¿Es Barfeye el futuro de la música? El nuevo sabor vintage del paisaje sonoro

🎵🚀 Barfeye: Un futurista de los sonidos retro y ecléctico, revolucionando la música 🎸🔮

Cuando Barfeye nos invitó a entrar a su universo con su último álbum “Artista revelación”, su bienvenida fue contundente: “Puedo ser un farsante, pero soy el hombre nuevo. Y si me meten preso, alguien me va a sacar. Y si no me sacan, será que tengo que estar preso. En síntesis, chúpenme bien un huevo”. Así comenzó nuestra exploración de su vasto paisaje sonoro en 2023, un viaje musical que se inició con “Black Beer” en 2016.

El propio Barfeye se describió una vez, en una entrevista con Indie Hoy, diciendo: “No elegí la música, tengo que hacerla aún si no quiero”. Desde aquel momento, el artista rosarino ha estado esculpiendo su sonoridad a partir de esa pasión necesaria, evolucionando constantemente en una búsqueda constante de lo que significa ser un músico en la era digital.

Evolución sonora y el futuro de la música

Barfeye ha hecho un camino único en la música, sumergiéndose en diversos géneros y utilizando instrumentos inesperados en su proceso creativo. Su enfoque se ha vuelto cada vez más minucioso, reflejándose en una producción sonora robusta y ecléctica.

Su habilidad para mezclar géneros, desde la balada en “El culpable” hasta el synth pop en “Cuando me levanto”, y su audaz fusión entre el trap y el folklore en “Canción de ausencia” demuestran un dominio ecléctico del paisaje sonoro. Pero lo más sorprendente de todo es su uso de instrumentos como el erkencho, un clarinete usado en la música incaica Harawi. ¿Dónde más podríamos encontrar un artista capaz de aunar tradición y vanguardia de tal forma?

¿Un maestro del “bricolaje” musical?

Barfeye, un verdadero “carpintero del sonido”, ha demostrado su habilidad para construir casas sonoras en los pantanos más insólitos. Por ejemplo, “Coche comedor” es una muestra brillante de su destreza, uniendo sonidos de folklore, autotune, distorsión de voz, brotes de reggaetón y hasta una armónica. Al final, la canción termina tan dulcemente como comenzó, dejándonos atónitos ante la montaña rusa emocional a la que nos ha sometido.

El punk rock y las críticas a la industria musical

Las primeras pistas del álbum, a diferencia de su trabajo anterior, carecen de la figura del “flâneur rosarino” agobiado por el desamor que Barfeye solía retratar. En su lugar, encontramos en “Fresas” un punk rock que critica a los “nepo babys” de la industria musical. ¿Está tomando Barfeye una posición en alguna polémica interna?

“Quiero salir en la tapa de la Rolling Stone así todos saben quién soy/ Quiero salir en la tapa de la Rolling Stone así mi mamá sabe quién soy”, confiesa en “La tapa”, un tema rock y pop con un scratch de hip-hop noventoso. A pesar de estas críticas, Barfeye no se considera un portavoz ni un purista.

Líricas explosivas y la complejidad del amor

La pluma de Barfeye impacta como un petardo, llenando la retina de la mente con versos sencillos pero intensos. En “Artista revelación”, varias canciones exploran la complejidad del amor, un desafío que muchos artistas evitan. Pero Barfeye se atreve, como en “Tristeza tem fim”, su primera canción alegre, inspirada por el amor que experimentó durante la grabación del álbum.

A pesar de lo que sugiere el título, Barfeye no está intentando hacer una declaración sesuda sobre su papel como músico en “Artista revelación”. Como dijo Leonard Cohen: “Hay una grieta en todo, así es como la luz entra”. Barfeye ha dejado que esa luz penetre en su trabajo, a pesar de que nunca ha renegado de su lado oscuro. Y ahora, solo quiere “sonreír todo lo que pueda. De hecho, voy a hacer dos discos más y probablemente deje de hacer esto, por un tiempo por lo menos”, concluye.

Con el avance del tiempo, y a medida que se siguen abriendo nuevas brechas en la música, las posibilidades para artistas como Barfeye parecen infinitas. Es posible que estemos ante el futuro de la música, una futura estrella que nos ofrece un sabor vintage al paisaje sonoro.