05/31/2017 – En un reciente estudio en mayo del 2017 los investigadores descubrían que conforme el carisma aumenta se pierde la eficiencia, en un punto.
Los líderes con personalidades atractivas bajas y altas son percibidos como menos eficaces que los líderes con niveles moderados de carisma. El análisis de los datos del estudio sugiere que el punto en el que la relación entre el carisma y la eficiencia se desgasta es la capacidad negativa para hacer frente a sucesos agobiantes. Podríamos suponer que los líderes muy carismáticos podrían fallar por razones interpersonales como la insolencia y el egocentrismo, pero los descubrimientos sugieren que los comportamientos relacionados con el negocio, más que con el comportamiento interpersonal, son los que impulsan la eficiencia del líder.
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