En Tirol del Sur, Saltaus, noa, la red de arquitectura ha completado últimamente la revisión del Apfelhotel Torgglerhof , evocando el encanto vintage de este hotel histórico mientras que crea un oasis para los sentidos y los instantes compartidos.
JULIO 2020
La manzana, una fruta que se produjo en Kazajstán y fue traída al Tirol del Sur por los romanos, es esencial para el paisaje cultural de la zona. El Torgglerhof se halla en la desembocadura del Val Passeier, sus raíces son profundas en la cultura tradicional del cultivo de manzanas.
Con el tiempo, se transformó en un sitio para las personas que desean quedarse, conectarse y gozar de las vistas panorámicas. Es acá donde se edificó el Apfelhotel , y desde ese momento se ha transformado tanto en un destino de excursión como en información privilegiada para los huéspedes que procuran un regalo de vacaciones y una escapada singular, con una arquitectura exquisita.
En dos mil catorce, noa * ganó un concurso de diseño para expandir la estructura existente del hotel, que se incorporó en múltiples etapas. En dos mil dieciséis, la edificación primordial con el restaurante y el viejo granero fueron desarticulados para su conversión.
La Apfelsauna se completó como la primera característica de un extenso paisaje de bienestar y relajación, que ahora se ha ampliado. En dos mil veinte, se edificaron dieciocho nuevas suites para los huéspedes y se diseñaron esmeradamente para amoldarse a la estructura del paisaje de la granja y complementar el ambiente rural.
Se hizo singular hincapié en conservar las peculiaridades del conjunto de la granja y sostener su escala. Como la pieza maestra central de este desarrollo rural, noa * diseñó un área de bienestar con arquitectura y flora que semeja a un moderno jardín exuberante. Una suerte de «corazón verde» que, como la sauna en forma de manzana, se integra sin inconvenientes y absolutamente en el paisaje.
La nueva instalación de bienestar, la nueva pieza central del hotel, no tiene testera de Northside, en cambio, se funde en una pendiente verde natural a fin de que la construcción apenas se pueda ver. La entrada al nuevo spa es una carcasa curva de hormigón semi-expuesto que se oculta en el paisaje y está desarrollada con un increíble portal hecho de madera vieja.
En la interfaz entre la superficie y el subsuelo, la palabra inmersión adquiere un significado propio. El lado sur del área de bienestar, por otra parte, se abre con una testera de vidrio y acero que se desvanece bajo una manta de flora en la azotea.
El dosel de acero, en el que escalarán las fragantes flores de jazmín, sobresale cara el cielo abierto, que recuerda a las estructuras de retención usadas en el cultivo moderno de manzanas. Una gran parte de la Brunnenhaus, , como asimismo lleva por nombre la nueva área de bienestar, está en una gran parte oculta a la vista.
Toda la estructura está cubierta con una capa de tierra y plantas, desarrollada para entremezclarse naturalmente en el fondo de la colina y de esta manera fusionarse con el paisaje. El spa cuenta con una fuente central hecha de piedra natural y una chimenea abierta en una extensa sala de estar, que conduce a las duchas, vestuarios y salas de belleza y masajes.
La piscina interior-exterior se extiende cara el exterior por medio de la testera verde cubierta y está parcialmente enmarcada con roca gneis metamórfica de Claraboya.
Origen: Apfelhotel Torgglerhof, Saltaus, South Tyrol / noa* – network of architecture — urdesignmag
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